BARCELONA (Sputnik) — La mesa del Parlamento de Cataluña mantiene a Quim Torra como diputado autonómico y presidente del Gobierno catalán a pesar de la orden de la Junta Electoral Central española de retirarle su escaño.
El órgano rector de la Cámara catalana tomó esta decisión con los votos en contra de retirar el escaño a Quim Torra de los partidos independentistas y el Partido Socialista de Cataluña, la confluencia catalana del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Pedro Sánchez.
Tanto las instituciones catalanas como el Gobierno español dan por hecho así que la situación jurídica del presidente de Cataluña no se resolverá de forma inmediata.
En una comparecencia tras el primer Consejo de Ministros del nuevo Gobierno español, Pedro Sánchez defendió a Torra como líder del Ejecutivo catalán y expresó su disposición a reunirse con su homólogo lo antes posible.
"No tengo ningún problema en reunirme con el presidente de la Generalitat de Cataluña, porque sigue siendo el presidente de la Generalitat de Cataluña", aseguró el presidente español pese a las amenazas de la derecha de llevar la destitución de Torra a los tribunales.
El líder independentista fue condenado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) a un año y medio de inhabilitación de su cargo por negarse a retirar insignias independentistas de edificios públicos en el periodo previo a las elecciones del pasado mes de abril en España.
Sin embargo, la condena por un delito de desobediencia no es firme y está pendiente de resolverse el recurso correspondiente en el Tribunal Supremo español, por lo que el cese de Torra al frente de la Generalitat catalana podría llevar varios meses.
En este contexto, la Junta Electoral Central decidió ejecutar la sentencia y dejar sin efecto la credencial de diputado electo al parlamento, algo que implica también su destitución de acuerdo con el Estatuto de Autonomía de Cataluña.
La Cámara catalana, que cuenta con una mayoría de diputados independentistas, optó por acogerse a su propio reglamento, que certifica que solo este órgano tiene potestad para alterar su propia composición y que la Junta Electoral "no es competente" para cesar al presidente.
Por otro lado, la mesa de la Cámara acordó también presentar su propio recurso ante el Supremo contra la inhabilitación de Torra, algo en lo que mostraron a favor tanto los grupos independentistas como los socialistas catalanes.
Tanto las instituciones catalanas como el Gobierno español dan por hecho así que la situación jurídica del presidente de Cataluña no se resolverá de forma inmediata.
En una comparecencia tras el primer Consejo de Ministros del nuevo Gobierno español, Pedro Sánchez defendió a Torra como líder del Ejecutivo catalán y expresó su disposición a reunirse con su homólogo lo antes posible.
"No tengo ningún problema en reunirme con el presidente de la Generalitat de Cataluña, porque sigue siendo el presidente de la Generalitat de Cataluña", aseguró el presidente español pese a las amenazas de la derecha de llevar la destitución de Torra a los tribunales.
El líder independentista fue condenado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) a un año y medio de inhabilitación de su cargo por negarse a retirar insignias independentistas de edificios públicos en el periodo previo a las elecciones del pasado mes de abril en España.
Sin embargo, la condena por un delito de desobediencia no es firme y está pendiente de resolverse el recurso correspondiente en el Tribunal Supremo español, por lo que el cese de Torra al frente de la Generalitat catalana podría llevar varios meses.
En este contexto, la Junta Electoral Central decidió ejecutar la sentencia y dejar sin efecto la credencial de diputado electo al parlamento, algo que implica también su destitución de acuerdo con el Estatuto de Autonomía de Cataluña.
La Cámara catalana, que cuenta con una mayoría de diputados independentistas, optó por acogerse a su propio reglamento, que certifica que solo este órgano tiene potestad para alterar su propia composición y que la Junta Electoral "no es competente" para cesar al presidente.
Por otro lado, la mesa de la Cámara acordó también presentar su propio recurso ante el Supremo contra la inhabilitación de Torra, algo en lo que mostraron a favor tanto los grupos independentistas como los socialistas catalanes.