Podemos concluye que la debacle se debe a su "debilidad organizativa" por las "peleas internas" del pasado
MADRID, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Coordinación Estatal de Podemos que lidera el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, ha determinado, en su primer análisis de la "derrota sin paliativos" que sufrieron en las elecciones gallegas y vascas del domingo, que los malos resultados se deben a "la debilidad organizativa en los territorios debido a las peleas internas de la etapa anterior", según informan fuentes del partido morado.
En cuanto a las soluciones, la Ejecutiva considera que los cambios en el modelo organizativo que ya se aprobaron en la Tercera Asamblea Ciudadana Estatal de mayo --en la que Iglesias fue reelegido con amplia mayoría, pero con una de las participaciones más bajas de la historia de Podemos-- son la clave para afrontar este problema. Asimismo, defienden que todavía "están a tiempo" de recuperarse.
De este modo, la cúpula de Podemos se ha centrado en debatir sobre la falta de implantación territorial y las peleas internas que les han desangrado, y deja fuera del debate cuestiones que se han señalado desde algunos sectores críticos como posibles causas de la debacle, como por ejemplo, un excesivo centralismo o la persecución de las discrepancias.
Tampoco han puesto en cuestión el liderazgo de Iglesias y de la actual dirección, tal y como ya avanzó la portavoz de la Ejecutiva, Isa Serra, en sus escuetas declaraciones del lunes, asegurando que Iglesias y su equipo de dirección fueron "revalidados" en esa asamblea de mayo. Este viernes no está previsto que Serra comparezca para dar cuenta públicamente de las conclusiones de este debate.
La entrada de Podemos en el Gobierno de coalición con el PSOE en enero --que provocó la salida del partido del sector anticapitalistas, por no aceptar las "contradicciones" que debían asumir-- tampoco es un factor a tener en cuenta en los malos resultados, según la dirección, tal y como se desprende de las conclusiones que han hecho públicas las fuentes consultadas.
Podemos y sus socios, que concurrieron a estas citas como Galicia en Común-Anova-EU y Elkarrekin Podemos-IU, se quedaron fuera del Parlamento gallego --pasando de ser segunda fuerza, con 14 escaños, a no sacar ninguno--, y redujeron casi a la mitad su presencia en la cámara vasca --de 11 escaños, se quedaron con 6--.
Cinco días después de la debacle, los máximos dirigentes de Podemos se han reunido este viernes, y junto a los candidatos del partido en Galicia y País Vasco, Antón Gómez-Reino y Miren Gorrotxategi, han determinado que las peleas internas que se han producido en esos territorios en los últimos años son la causa de su descalabro electoral, ya que les han impedido construir una organización fuerte.
Ante esta problemática, las fuentes consultadas señalan "la necesidad de poner en marcha cuanto antes lo aprobado en la Asamblea Ciudadana para poner el partido en dirección al próximo ciclo electoral". Estamos a tiempo de recuperarnos sobre los resultados actuales", añaden.
En noviembre, Iglesias defendió, en una carta remitida a la militancia, que tenían que abordar la tarea de "fortalecer" la organización y los círculos --las agrupaciones de base-- y meses después, en ese documento organizativo que presentó en Vistalegre III, señaló la debilidad del partido a nivel local.
El nuevo modelo aprobado en esa tercera asamblea supone la modificación de los órganos de dirección autonómicos, integrando enlaces con los círculos; la creación de una nueva estructura a nivel provincial --bautizada como Redes de Círculos Provinciales--, como espacio intermedio de participación; y la sustitución de las actuales direcciones municipales por los llamados Consejos de Círculos o Plenarios.
La falta de implantación territorial ya se identificó como lacra a resolver tras los malos resultados de la formación en las autonómicas de mayo de 2019. De hecho, Iglesias decidió entonces sustituir al frente de la Secretaría de Organización a Pablo Echenique --actual portavoz en el Congreso-- por el diputado canario Alberto Rodríguez, que ahora tiene en sus manos el reto de dirigir los nuevos cambios.
Tal y como ya señaló Iglesias la semana pasada, los "numerosos escándalos de corrupción que están apareciendo" cuestionan, según la dirección de Podemos, la "utilidad" de la monarquía, y exigen abrir espacio al debate "para avanzar hacia una democracia más fuerte", llevando a cabo "aportaciones en clave propositiva".
El Consejo de Coordinación Estatal de Podemos que lidera el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, ha determinado, en su primer análisis de la "derrota sin paliativos" que sufrieron en las elecciones gallegas y vascas del domingo, que los malos resultados se deben a "la debilidad organizativa en los territorios debido a las peleas internas de la etapa anterior", según informan fuentes del partido morado.
En cuanto a las soluciones, la Ejecutiva considera que los cambios en el modelo organizativo que ya se aprobaron en la Tercera Asamblea Ciudadana Estatal de mayo --en la que Iglesias fue reelegido con amplia mayoría, pero con una de las participaciones más bajas de la historia de Podemos-- son la clave para afrontar este problema. Asimismo, defienden que todavía "están a tiempo" de recuperarse.
De este modo, la cúpula de Podemos se ha centrado en debatir sobre la falta de implantación territorial y las peleas internas que les han desangrado, y deja fuera del debate cuestiones que se han señalado desde algunos sectores críticos como posibles causas de la debacle, como por ejemplo, un excesivo centralismo o la persecución de las discrepancias.
Tampoco han puesto en cuestión el liderazgo de Iglesias y de la actual dirección, tal y como ya avanzó la portavoz de la Ejecutiva, Isa Serra, en sus escuetas declaraciones del lunes, asegurando que Iglesias y su equipo de dirección fueron "revalidados" en esa asamblea de mayo. Este viernes no está previsto que Serra comparezca para dar cuenta públicamente de las conclusiones de este debate.
La entrada de Podemos en el Gobierno de coalición con el PSOE en enero --que provocó la salida del partido del sector anticapitalistas, por no aceptar las "contradicciones" que debían asumir-- tampoco es un factor a tener en cuenta en los malos resultados, según la dirección, tal y como se desprende de las conclusiones que han hecho públicas las fuentes consultadas.
DEBATE CINCO DÍAS DESPUÉS DE LAS ELECCIONES
Iglesias decidió posponer hasta este viernes la habitual reunión de los lunes de su Ejecutiva, con el objetivo de no realizar análisis en caliente de la debacle, y esperar a tener una primera valoración de los territorios afectados.Podemos y sus socios, que concurrieron a estas citas como Galicia en Común-Anova-EU y Elkarrekin Podemos-IU, se quedaron fuera del Parlamento gallego --pasando de ser segunda fuerza, con 14 escaños, a no sacar ninguno--, y redujeron casi a la mitad su presencia en la cámara vasca --de 11 escaños, se quedaron con 6--.
Cinco días después de la debacle, los máximos dirigentes de Podemos se han reunido este viernes, y junto a los candidatos del partido en Galicia y País Vasco, Antón Gómez-Reino y Miren Gorrotxategi, han determinado que las peleas internas que se han producido en esos territorios en los últimos años son la causa de su descalabro electoral, ya que les han impedido construir una organización fuerte.
Ante esta problemática, las fuentes consultadas señalan "la necesidad de poner en marcha cuanto antes lo aprobado en la Asamblea Ciudadana para poner el partido en dirección al próximo ciclo electoral". Estamos a tiempo de recuperarnos sobre los resultados actuales", añaden.
En noviembre, Iglesias defendió, en una carta remitida a la militancia, que tenían que abordar la tarea de "fortalecer" la organización y los círculos --las agrupaciones de base-- y meses después, en ese documento organizativo que presentó en Vistalegre III, señaló la debilidad del partido a nivel local.
El nuevo modelo aprobado en esa tercera asamblea supone la modificación de los órganos de dirección autonómicos, integrando enlaces con los círculos; la creación de una nueva estructura a nivel provincial --bautizada como Redes de Círculos Provinciales--, como espacio intermedio de participación; y la sustitución de las actuales direcciones municipales por los llamados Consejos de Círculos o Plenarios.
La falta de implantación territorial ya se identificó como lacra a resolver tras los malos resultados de la formación en las autonómicas de mayo de 2019. De hecho, Iglesias decidió entonces sustituir al frente de la Secretaría de Organización a Pablo Echenique --actual portavoz en el Congreso-- por el diputado canario Alberto Rodríguez, que ahora tiene en sus manos el reto de dirigir los nuevos cambios.
LA UTILIDAD DE LA MONARQUÍA, EN CUESTIÓN
Por otra parte, los máximos dirigentes de Podemos también han aprovechado su reunión de este viernes para debatir sobre las últimas noticias sobre la monarquía y las presuntas irregularidades del Rey emérito Juan Carlos I.Tal y como ya señaló Iglesias la semana pasada, los "numerosos escándalos de corrupción que están apareciendo" cuestionan, según la dirección de Podemos, la "utilidad" de la monarquía, y exigen abrir espacio al debate "para avanzar hacia una democracia más fuerte", llevando a cabo "aportaciones en clave propositiva".