Barcelona recuerda a las víctimas de los atentados del 17 de agosto



1092438296.png?10716944171597653450


El acto de homenaje del 17A, que se ha visto reducido por el coronavirus, consta de un minuto de silencio y una ofrenda floral.
Se cumplen tres años de los atentados que comenzaron con un atropello masivo en Las Ramblas de Barcelona en la tarde del 17 de agosto de 2017 y continuaron con varios ataques con arma blanca en Cambrils. Ambos ataques acabaron con la vida de 16 personas y dejaron 140 heridos.

Para rendir homenaje a las víctimas, el Ayuntamiento de Barcelona celebra un acto que ha empezado a las 10 de la mañana con un minuto de silencio en el Pla de l’Os de Las Ramblas, seguido por una ofrenda floral. En esta ocasión se trata de un acto breve, debido a la pandemia del coronavirus.

​Al acto han asistido el Ministro de Sanidad, Salvador Illa; la presidenta del Congreso; Meritxell Batet; la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera; el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, entre otras autoridades.

Se acerca el juicio en la Audiencia Nacional

Tres años después de que tuvieran lugar estos atentados, el juicio en la Audiencia Nacional contra los tres acusados de formar parte de la célula yihadista que perpetró los atentados, cada vez está más cerca, aunque todavía no se conoce la fecha en la que se llevará a cabo. Precisamente, unas semanas antes de cumplirse el tercer aniversario se conocieron los escritos de acusación de la Fiscalía y de las acusaciones contra los detenidos que, aunque no participaron directamente en los atentados, sí pertenecían al grupo que los ideó y los llevó a cabo.

Driss Oukabir, Mohamed Houli Chemal y Said Ben Lazza serán juzgados por los delitos de integración y colaboración con organización terrorista y fabricación de explosivos, pero no por los muertos y heridos que dejó el atentado, ya que los autores materiales de los atentados murieron a manos de la Policía.


El Ministerio Público y la Fiscalía piden penas que van desde los ocho a los 41 años de prisión para los acusados. El Gobierno de Cataluña pide una pena de 44 años de cárcel para Houli y Oukabir, y de ocho años para Ben Iazza. Sin embargo, el Ayuntamiento de Barcelona pide 90 y 95 años para los dos primeros y ocho para su compañero. Las asociaciones de víctimas, personadas en la causa, son las que piden una sentencia más dura ya que sí que consideran que Chemlal y Oukabir son responsables de las muertes y los heridos, así que piden para ellos la prisión permanente revisable y una condena de 25 años de cárcel para Ben Iazza, por colaboración con organización terrorista y depósito de explosivos.